En este tag os vamos a hablar de la Semana Santa de Úbeda (Jaén), es una Semana Santa muy bonita en la que se combinan distintos estilos.
Hoy nos vamos a centrar en dos cofradías, La Soledad y La Noche Oscura.
Empecemos con la Hermandad la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y María Magdalena (Sociedad Benéfica de Albañiles), comúnmente conocida como La Soledad.
Cuando alguien piensa en la Semana Santa de Úbeda lo primero que se viene a la cabeza es la imagen de la descompuesta cara de una virgen tan bella como La Soledad.
Amadeo Ruíz Olmos es el "creador" de esta imagen, encargada en 1943 en sustitución de una antiquísima talla destruida durante la Guerra Civil española.
Es acompañada en su trono por una imagen de María Magdalena obra del mismo autor y una cruz cilíndrica de madera vestida por un sudario.
La cofradía tiene su sede en la Iglesia de San Millán, lugar donde se custodian las tallas. Viste de negro con cíngulo, bocamangas y peto triangular de color blanco.
La procesión se celebra cada Viernes Santo, desfilando en un silencio interrumpido por la interpretación de desgarradoras saetas, a la salida y entrada del templo se interpreta la misteriosa marcha Stabat Mater de la que luego hablaremos.
La Soledad el Viernes Santo en la Magna Procesión
Ahora hablaremos de la Cofradía penitencial del Cristo de La Noche Oscura de Úbeda.
La cofradía es fundada en 1966, visten de marrón con cíngulo y escapulario blancos, sus hermanos portan un farol y tienen como insignia la cruz potenzada. Tiene su sede en el Santuario de María Auxiliadora.
El titular de la cofradía, el Cristo de la Noche Oscura es obra de Francisco Palma Burgos (autor de entre otros, el Cristo de la Buena Muerte de Málaga) en 1966, inspirado en un dibujo de San Juan de la Cruz, y existente en su museo.
La mayor peculiaridad del Cristo es su inclinación hacia delante, con la barbilla pegada al pecho, cuando le preguntaron al autor por este detalle respondió que de esta manera los fieles deberán arrodillarse para rezarle y verle el rostro.
Desfila en un trono de madera, austero, sin exorno floral, con un cirio en cada esquina del trono y es portado a hombros.
La procesión se desarrolla en silencio con el único sonido de las horquetas con las que los hombres de trono golpean el suelo. Durante la procesión se rezan las estaciones del vía-crucis.
Un momento especial es cuando el Cristo se encuentra con la Virgen de La Soledad que le espera a las puertas de su templo, allí se reza la decimocuarta estación del vía-crucis. Una vez concluido la Virgen retrocede dejando entrar al Cristo en el templo al son de una saeta, posteriormente se interpreta el Stabat Mater, una marcha del siglo XIX de la que poco se sabe, solo se conservan parte de las partituras, se cree que estaba destinada al canto debido a las variaciones bruscas de la melodía, más propio de la voz que de cualquier otro instrumento.
Perfil del retorcimiento del Cristo en la cruz
