Cofrades del atado
Sus principales procesiones son:
El Lunes Santo colaboran en la Procesión del Santísimo Rosario del Dolor aportando esta cofradía a Nuestro Padre Jesús atado a la columna rezándose los misterios en la Plaza de San Pablo.
El señor a la columna
El Martes Santo es su procesión titular, la Peregrinación de la Promesa que desde el Monasterio de Santa Isabel partirán a la Iglesia de la Vera-Cruz a por su imagen titular del atado a la columna pues es propiedad de dicha cofradía, la de la vera-cruz, desde allí partirán a la Iglesia de Nuestra Señora del Pilar donde renovaran la promesa del silencio.
Saliendo de la Vera-Cruz
El Viernes Santo en la procesión General aportaran los pasos de "preparativos para la flagelación" el único paso de su propiedad, el señor atado a la columna de la Vera-Cruz y "el azotamiento del señor" propiedad del Museo Nacional de Escultura y el Cristo de la cofradía de la Pasión.
En la procesión general
Los pasos son los siguientes:
El paso de preparativos para la flagelación muestra al Cristo de la humildad junto a la columna y recogiendo su túnica en una mano mirando hacia abajo con mucha humildad esperando su tortura.
Es obra del escultor murciano José Antonio Hernandez Navarro del año 2004.
Preparativos para la flagelación
El azotamiento del señor es obra de la escuela castellana realizado hacia 1650, siendo el Cristo atribuible a Antonio de Ribera o a Francisco Diez de Tudanca de 1650, siendo este propiedad de la cofradía de la Pasión, el resto de imágenes que azotan a Cristo son obras de escuela castellana siendo uno de los sayones azotadores original de Gregorio Fernández al igual que el que tira de la cuerda pudiendo haber pertenecido a un paso del azotamiento de la vera cruz, todas estas imágenes se encuentran en el Museo Nacional de Escultura.
El azotamiento
El Cristo atado a la columna bellísima imagen de Gregorio Fernández perteneció al paso del azotamiento de la Vera-Cruz y que por causa de guerra ha desaparecido o se encuentran formando otros pasos realizado hacia 1619- 1623, siendo propiedad de la Vera-Cruz y cedido a esta para alumbrarlo.
Cuenta la leyenda que una vez que Fernandez acabo la talla le pregunto el Cristo: ¿Donde me viste que tan bien me retrataste? a lo que le contesto el: Señor, en mi corazón.
La impronta de Fernandez...
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